15/6/08

La vergüenza de la jornada de 65 horas

Este gran artículo lo ha publicado nuestro compañero Roberto Barrilado en su blog Cuadernos Keynesianos.



Hace 91 años, la OIT acordó reducir la jornada laboral a 48 horas semanales. Ayer, la UE dio el primer paso para acabar con este logro histórico, permitiendo a cada país que pueda desmarcarse de este límite hasta alcanzar las 60 horas con carácter general y las 65 horas para colectivos como los médicos, a los que no quieren computarles como tiempo de servicio las horas de inactividad en las guardias. Por cierto, las dos últimas sentencias del Tribunal de Justicia de la UE indican que estas horas SÍ deben considerarse laborales a todos los efectos: remuneración, descansos, etc.

España ha venido siendo uno de los más firmes defensores de dejar el asunto como estaba durante los 3 últimos años con el apoyo de Francia e Italia, en contra de las tesis de Alemania y Reino Unido. Pero tras el ascenso al poder de Sarkozy y Berlusconi, se avecinan tiempos revueltos. Sorprende también el apoyo a esta medida del gobierno "laborista" de Gordon Brown. Como el Ministro Corbacho ha afirmado, esta norma nos acerca más al S. XIX que al XXI.

Se me ocurren algunas razones por las que esta norma no debería salir adelante:

1º Redundará en pérdidas de productividad. Es bastante lógico pensar que no se trabaja igual después de 10 horas en el tajo.

2º Aumentará el paro y empeorará la distribución del trabajo y la renta derivada de éste entre trabajadores.

3º Afectará con especial virulencia a las clases de trabajadores con menos formación y menos poder negociador.

Como no podía ser de otra manera, el PP, a través de su portavoz de trabajo, José Ignacio Echániz, se ha apresurado en criticar al Gobierno de España y confundir al personal diciendo que si esto no es de obligatoria aceptación por los estados, que si sólo afectará a determinados colectivos. Todo esto es falso:

- Cuando un país de la UE lo adopte, los demás tendrán que seguirlo inmediatamente si quieren evitar la fuga de sus empresas buscando mano de obra en régimen de esclavitud. Se abre así la veda a la práctica del llamado "dumping social" en la Unión, esto es, ganar competitividad en base a recortar derechos sociales.

- En Reino Unido se venían acogiendo a la cláusula del "opting out", que permite al trabajador fijar libremente con el empresario las condiciones de la relación laboral. Es falso que el trabajador tenga la capacidad de negociar con el empresario los términos de la jornada laboral. El poder negociador corresponde al empresario, que será el que impondrá sus condiciones. Al trabajador tan solo le quedará aceptarlas o largarse a la calle.

Cada vez que parece que las teorías del infame Milton Friedman no pueden hacer más daño a este mundo, alguien se encarga de que así sea.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

oye y sobre la directiva de retorno, que el psoe ha votado a favor y que vulnera radicalmente la carta de derechos uhmanos, permitiendo hasta 18 meses de detención solo por ser migrante ¿qué os parece?, a mi desde luego me deja claro que la UE fortaleza que están construyendo socialistas y populares me da nauseas y me avergüenza de ser europeo. otro mundo es posible, otro capitalismo no (lo demás es autoengañarse). No a los centros de detención de inmigrantes, no a la cárcel por escapar de las injusticias, no ala directiva de la vergüenza

Anónimo dijo...

Yo estoy de acuerdo contigo. Aún siendo un joven socialista creo que al PSOE y sus eurodiputados no lo podían haber hecho peor.

Y creo que como la eurocámara siga así el resultado del referéndum de Irlanda no va a ser una excepción.